Capítulo mil de que todos los cambios son para mejor. Al menos en las primeras de cambio, valga la redundancia. Juniel Querecuto y Pedro Castellanos han encontrado su lugar en Tiburones de La Guiara y han respondido a las expectativas inmediatamente.
Los litoralenses tienen racha de cuatro compromisos ganados, algo que les hacía falta, casualmente desde que el par de peloteros llegaron vía cambio. No es solo casualidad, sino que ellos han hecho que sea causal porque han ayudado a estos triunfos.
Comencemos el desglose de sus actuaciones con el de más cartel, Juniel Querecuto.
El infielder bateo .375 desde su arribo al litoral con un OPS de .819. Seis de sus hits han significado cuatro carreras remolcadas y otras cuatro anotadas. Además, ha negociado dos bases por bolas. Ha dado al menos un hit en sus cuatro duelos disputados.
«Estoy contento. Tanto para mí como para mi familia es un gran oportunidad. Agradezco a la gerencia por la confianza, por tomarme en cuenta. Vamos a seguir guerreando todos los juegos, los 27 outs», declaró Juniel a BeisbolPlay.
Querecuto es un jugador probado en esta liga, que puede ayudar con el madero, pero también con su polivalencia defensiva. En su corta estadía en La Guaira ha estado cubriendo el campocorto y la tercera base.
«El día que llegue Guillén de una vez me agarró y me dijo que quería que lo ayudara a ganar. A jugar las tres posiciones y solo le dije que estaba a su completa disposición, que donde quisiera que jugara ahí lo iba a hacer con tal de ayudar al equipo a ganar», atizó.
Por su parte, Pedro Castellanos está respondiendo de la manera que mejor sabe: produciendo.
El slugger vino con la grúa desde Barquisimeto y no ha dejado de batear desde su llegada al actual campeón de la LVBP y el Caribe.
Ubicado como cuarto en el orden «El Demoledor» empezó a hacer lo suyo desde el primer día en Macuto. Se fue de 5-4 con doble, jonrón, tres anotadas y una impulsada en su estreno.
Al día siguiente repitió la dosis con vuelacerca y dos remolcadas más. De hecho, en sus cuatro choques jugados hasta ahora, Castellanos ha dado dos o más hits y empujado al menos una rayita.
Su promedio en Tiburones es de .556 (18-10) con un OPS absurdo de 1.523, seis anotadas y cinco impulsadas. Así que sale mejor como el dicho: «Dale boleto que les sale más barato».
«Solo puedo darle gracias a Dios por haber llegado a un equipo que me está dando muchas oportunidades. Desde que llegué me han tratado muy bien, algo que uno como deportista siempre espera, que te den confianza y respeto», mencionó el paleador de 26 años.
Juniel Querecuto y Pedro Castellanos habían perdido espacio en Cardenales de Lara, el único equipo que habían defendido. Esto prueba que muchas veces la zona de confort, realmente no es una zona de confort y que hay otros lugares que explorar para resurgir.