La incertidumbre que envolvió a los Dodgers de Los Ángeles tras las dolencias de la superestrella japonesa parece disiparse. Shohei Ohtani, quien sufrió una lesión llamada subluxación (dislocación parcial) del hombro izquierdo durante el Juego 2 de la Serie Mundial ante los Yankees de Nueva York, solo dio un susto y estaría en condiciones de jugar el tercer encuentro.
La jugada que encendió las alarmas se produjo en el séptimo inning del pasado sábado, cuando Ohtani intentó robar la segunda base. El deslizamiento, desafortunadamente, terminó con el astro nipón sintiendo molestias en su hombro izquierdo. Las pruebas realizadas y las valoraciones médicas posteriores han arrojado resultados alentadores.
Dave Roberts, manager de los Dodgers, se mostró optimista sobre la situación de Ohtani. Parece que todo se reduce a la tolerancia al dolor. «Si Shohei no siente molestias, no veo por qué no pueda jugar«, afirmó Roberts en conferencia de prensa. El estratega angelino destacó la importancia de la capacidad de recuperación de Ohtani y su determinación.
La ausencia de Ohtani en la Serie Mundial ha sido notable. El japonés, quien ha revolucionado el beisbol con su combinación única de poder y velocidad, ha bateado solo un doble en ocho turnos al bate en la Serie Mundial. Sin embargo, su presencia en el lineup va más allá de las estadísticas. Ohtani es un líder nato y su energía contagia a todo el equipo.
Los Dodgers, que buscan su primer título desde 2020, necesitan a Ohtani en su mejor versión. Si bien la lesión representa un contratiempo, los «Boys In Blue« confían en que «ShoTime« podrá superar este obstáculo y ayudar al equipo a alcanzar el objetivo.
Los fanáticos de los Dodgers, y del beisbol en general, esperan con ansias el regreso de «El Unicornio« al terreno de juego.