Los Dodgers de Los Ángeles salieron airosos en el quinto duelo de la Serie Divisional ante los Padres de San Diego y se clasificaron para la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, donde ya los esperan los Mets de Nueva York.
En el encuentro definitivo hubo un duelo entre abridores japonenes, Yu Darvish ante Yoshinobu Yamamoto. Fue una verdadera batalla en el montículo en la que solo dos cuadrangulares marcaron la diferencia.
Los bambinazos fueron obra de los «Hernández», Kike (en el segundo inning) y Teoscar (en el séptimo episodio). Sus conexiones largas y en solitario, colocaron las únicas dos rayitas en el marcador para el definitivo 2-0.
La ofensiva de los religiosos se apagó ante los envíos de Yamamoto y, posteriormente, los relevistas de los Dodgers, que limitaron los inatrapables de los Padres a solo 2, concretamente, un par de sencillos. Esos batazos sucedieron en la parte alta del 3er capítulo ante los lanzamientos del nipón, y sus autores fueron Kyle Higashioka y el venezolano Luis Arráez.
Desde este domingo, 13 de octubre, dará inicio la serie por el campeonato del Viejo Circuito entre los Dodgers y el conjunto metropolitano, comandado por Carlos Mendoza.
Si bien «The Boys In Blue» son los favoritos para continuar hacia la Serie Mundial, lo realizado por los neoyorquinos no es despreciable. Un conjunto del cual se dudaba, incluso, su presencia en la postemporada, tiene argumentos para poder despachar a uno de los equipos más poderosos de la liga.
Dependerán de que Francisco Lindor continúe en «modo MVP» y que se pitcheo pueda dominar los bates de Shohei Ohtani y del resto de la toletería angelina.