Jim Leyland puede considerarse como uno de los mánagers más queridos la historia de las Grandes Ligas. Su manera de dirigir, además de sus logros en el banquillo,fueron claves para su exaltación al Salón de la Fama en Cooperstown en esta clase 2024.
Como parte de esos homenajes que recibirá el eterno «Skipper», el próximo 3 de agosto verá el retiro de su dorsal N°10 en los Tigres de Detroit, en medio de una ceremonia en el Comerica Park.
Leyland, quien fuera el estratega de los Tigres entre 2006 y 2013, vivió grandes momentos en la franquicia bengalí. Quizás, el más especial de todos fue aquella Serie Mundial ante los Cardenales de San Luis en su primer año al frente de los felinos.
Jim Leyland, legend. pic.twitter.com/l3CxpcWn93
— Miguel Cabrera’s Bat (Benson) (@Miggysbat) December 4, 2023
Ahora bien, el retiro de su número en la organización de Detroit significa un logro sentido por los ex jugadores venezolanos a quienes dirigió en su paso por los Tigres, entre los cuales destacaron: Miguel Cabrera, Magglio Ordóñez, Víctor Martínez, Armando Galarraga, Aníbal Sánchez, Omar Infante, Carlos Guillén, entre otros.
Para Leyland, tener a Miguel Cabrera en su época premium fue algo que muchos recordarán en el tiempo; incluso hay quienes comentan quien guio al futuro miembro del Salón de la Fama en aquella primera campaña con los Tigres y sus problemas extra deportivos, fue el propio Leyland.
Miguel Cabrera, Alan Trammell y Jim Leyland, parte de lo mejor de la historia de @tigers. pic.twitter.com/JSBVovRO9u
— Efraín Zavarce (@EfrainZavarce) September 29, 2023
En 22 años como mánager en las Mayores, Leyland alcanzó 1.769 victorias frente a 1.728 derrotas para culminar sobre .500 ese average de ganados y perdidos. Con respecto a sus logros, fue el primer mánager que levantó un trofeo de la Serie Mundial con los Marlins de Miami (1997) y, además, se llevó dos campeonatos de liga, ambos con Detroit en 2006 y 2012, pero sin suerte en esos Clásicos de Otoño.
Jim Leyland y su vínculo con Venezuela
Hablar de Jim Leyland, es hablar de un mánager que estuvo estrictamente vinculado con Venezuela por la cantidad de criollos que dirigió en su paso por la MLB.
En 1987, en apenas su segundo año como mánager de Piratas de Pittsburgh tuvo bajo su tutela a Alfredo Pedrique, entonces campocorto del equipo y un año más tarde a Miguel Ángel García, quien perteneció a los bucaneros entre 1988 y 1989.
Años más tarde, Carlos García también fue dirigido por este peculiar estratega en Pittsburgh; mientras que a finales de los noventa, en 1999 le tocó el turno a Henry Blanco, en su único año como mánager de Rockies de Colorado.
No hay duda que este homenaje a Leyland va cónsono con lo que gestó este piloto en su carrera en el mejor beisbol del mundo. ¡Honor a quien honor merece!
