Si hay algo con que cuenta Venezuela en el beisbol de Grandes Ligas es con un futuro promisorio y para los próximos años, parece que el talento criollo está asegurado. Muestra de ello son los nombres de prospectos venezolanos que conforman la élite del beisbol.
¿Pero y quiénes son estos prospectos?
Como todos los años, MLB realiza un ranking de los mejores jugadores próximos a debutar en las Mayores y para este 2025, tres venezolanos conforman un triunvirato de oro, al ser parte del Top 3 de los mejores prospectos de sus respectivas organizaciones.
Hablamos de Jeferson Quero, quien sirve como el prospecto N°1 de Cerveceros de Milwaukee, luego de que Jackson Chourio hiciera su debut en la MLB en 2024 y cerró la temporada con el 20-20 (veinte jonrones y veinte bases robadas), antes de cumplir la mayoría de edad legal en Estados Unidos (21 años).
Quero, quien ocupa la receptoría aún se recupera de una operación en el labrum de su hombro derecho. Sin embargo, eso no le impidió ser parte de la élite del beisbol para esta campaña.
Aunque su mayor rival es, precisamente, William Contreras, Jeferson Quero cuenta con las credenciales suficientes para brillar muy pronto en el mejor beisbol del mundo.
En cuatro años en las menores, Jeferson Quero evolucionó como pelotero. Incluso, en 2023 – último año completo en el beisbol – descargó 16 jonrones en 90 compromisos.
Asimismo, otro catcher ocupa uno puesto elitesco en el futuro del beisbol; nos referimos a Ethan Salas, quien aparece como el prospecto N°2 de Padres de San Diego, con tan solo 18 años de edad.
Salas, quien recibió $5.6 millones de bono por su firma en 2023, fue considerado el jugador más cotizado del período de firmas internacionales. Y, aunque falta pulirse en el máximo nivel, su debut en la MLB se acerca más y más.
Por último, Jaison Chourio, cierra este podio entre los mejores prospectos venezolanos, al ser el N° 3 en toda la organización de Guardianes de Cleveland. Incluso, sirve como uno de los 10 mejores jardineros del futuro en el beisbol.
En 2024, militó en la sucursal Clase A, en donde dejó promedio de .270 con 44 bases robadas.
