Este miércoles le salió un trabajo de última hora a Ángel Padrón: ser el abridor contra Gigantes de Rivas (Nicaragua). El zurdo, quien venía haciendo laborales de relevista en la presente Serie del Caribe, aceptó la misión y terminó la jornada con 88 lanzamientos y un no hittter anotado en su síntesis curricular.
Solo una bases por bolas en nueve entradas separó a Padrón de un juego perfecto. Con todo y eso la noche fue memorable e histórica para el venezolano que se convirtió en el segundo pitcher y primer latinoamericano en lanzar sin hit ni carrera en Serie del Caribe.
En principio, el plan era que Padrón tuviera una salida corta, dado que en la presente justa era parte del bullpen. “Creo que tuve que cambiar el chip rápido y me dijeron que iba de dos a tres, máximo cuatro innings», explicó el protagonista.
Para el oriundo de San Cristóbal, estado Táchira, no fue fácil asumir el reto de iniciar el compromiso ante los centroamericanos. «Creo que lo más difícil de hoy fue levantarme y recibir la noticia que iba a abrir, porque estaba mentalizado en relevar, en venir del bullpen para cualquier situación”, resaltó Ángel Padrón.